Economía

Noosa Capital: si la Fed retira los estímulos se desaceleraría la reactivación de los emergentes

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Agencia Uno
POR Antonia Eyzaguirre |

Sebastián Vives, director del área de inversiones, dijo que la bolsa local está hoy más condicionada por los temas locales, como un cuarto retiro, que por los externos.

Este viernes 27 de agosto, el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, participará en el simposio sobre política monetaria que se lleva a cabo tradicionalmente en Jackson Hole. El mercado espera ansioso ese día, en el que se podrían entregar señales de cuándo y cuánto comenzaría a desmantelarse el millonario programa de estímulos que comenzó en 2020 y que se traduce en una inyección mensual de recursos por US$ 120 mil millones. Este ciclo de retiros es conocido como “tapering”, según su definición en inglés. 

Este gigantesco aporte de fondos tiene sus orígenes teóricos en la crisis subprime, cuando la Fed estadounidense se dio cuenta que no bastaba con una baja en las tasas de interés para reactivar la economía y comenzó a inyectar dinero directo a través de la compra de distintos instrumentos. En 2020, la suma alcanzó los US$ 4 trillions (millones de millones), con lo que hoy la Fed tiene en su balance bonos y activos respaldados por hipotecas por más de US$ 8 trillions, sumando lo inyectado en 2008, 2010, 2012 y 2020.

Sebastián Vives, director del área de inversiones de Noosa Capital, en conversación con Pauta de Negocios, de Radio PAUTA, explicó que si bien estos aportes de recursos fueron fundamentales en la pandemia, hoy no se justifican ya que la economía estadounidense está volviendo a niveles normales e, incluso, podría estar presionando a una mayor inflación.

El ejecutivo prevé que en la reunión de Jackson Hole no habrá noticias sobre el inicio del retiro de los estímulos, pese al nerviosismo del mercado, pero sí cree que en septiembre –y en la medida que no siga avanzando la variante Delta del Covid-19-, se empezarían a dar luces de este proceso, el que podría comenzar a fin de año. Esto impactaría los resultados de las bolsas en el corto plazo. Sin embargo, Vives proyecta que luego se volvería a retomar el movimiento al alza. “Donde vemos más peligro es en las tasas de interés”, advirtió.

Lo anterior tendría resultados en los mercados emergentes, ya que el avance de las tasas de interés impulsarían al tipo de cambio, lo que a su vez impactaría en el precio de los recursos naturales. “Un dólar al alza debería afectar a los commodities y podría ralentizar la recuperación de las economías emergentes”, puntualizó.

Bolsa chilena “con vida propia”

Vives explicó que si bien un menor precio de los commodities, como el cobre, afectaría los recursos fiscales en Chile, la bolsa local igual “está con vida propia”. El ejecutivo explicó que si bien los cambios en el plan de estímulo de la Reserva Federal se sumarán a la discusión sobre el desempeño del mercado local, esto no va a determinar los precios accionarios chilenos en los próximos dos o tres años. “Estamos viviendo procesos internos más importantes que esto”, dijo.

Al respecto, indicó que hay dos variables que están afectando fuertemente a los activos chilenos. Por un lado, el riesgo político, “con todas las variables de nuevas reglas del juego, nuevas reglas regulatorias, cambios a la Constitución”. Por el otro, el tema de los retiros de los fondos de pensiones, que calificó como “un desmantelamiento al sistema financiero”. 

Vea la entrevista con Sebastián Vives, director del área de inversiones de Noosa Capital