Columna de John Müller: “El camello de los expertos”

El Consejo Constitucional no debe mirar el anteproyecto de los expertos como un texto sagrado, inamovible, sino someterlo a las pruebas del sentido común.

Como Pigmalión que se enamoró de la estatua que estaba esculpiendo, los miembros de la Comisión Experta han quedado fascinados con su obra, el anteproyecto constitucional sobre el cual deberá trabajar desde este miércoles el Consejo Constitucional elegido el 7 de mayo pasado. He hablado con varios de ellos y coinciden en que nadie está feliz al cien por ciento con el texto acordado y eso les parece una señal de éxito.

Mi escepticismo crece cuando compruebo que esta actitud -como a nadie le gusta del todo, el texto no debe estar tan mal- se ha convertido en unanimidad: los 24 expertos están de acuerdo en estar de acuerdo en eso. Y pienso que esa es la misma actitud que tenía aquella comisión de expertos que debía diseñar un caballo y terminó dibujando un camello.

Y todavía me estremezco más cuando el presidente de la República dice que él aprobaría ya ese anteproyecto porque los camellos son bonitos, aunque no sean tan ágiles como los caballos. Entonces, ¿por qué Gabriel Boric aceptó que eligiéramos un Consejo Constitucional? Si el borrador de los técnicos elegidos por el Congreso está bien, ¿por qué no nos quedamos aquí?

Si malo es el conflicto y la polarización, peor es el consenso idiota. Y, a veces, pienso que el movimiento pendular de la política chilena nos está llevando de uno a otro sin paradas en el sentido común.

La denostada Convención también tuvo sus expertos y la pifiaron bastante. Así que creo que la actitud más sana del Consejo sería revisar a fondo este texto y abordarlo sin ningún tipo de temor reverencial ante lo que han hecho los expertos. Pónganlo cabeza abajo si quieren, discutan un régimen parlamentario si les parece bien, pongan a Dios en el encabezado si creen que eso va a ser bueno para Chile, pero no se detengan un minuto a pensar que un anteproyecto como éste es inamovible. Para eso los eligieron.