Se afirma el mercado del cobre

Fundamentos sólidos en demanda y buen precio configuran un buen escenario para el cobre. “El mercado del cobre debiera mantenerse firme”, dice el presidente ejecutivo del Consejo Minero, Joaquín Villarino.

Esta semana, como cada abril, se desarrolla en Santiago la Cesco Week, uno de los eventos más importantes de la minería mundial.

Este año, el encuentro se realiza en medio de un clima de incertidumbre, en especial por la guerra comercial y la desaceleración china, la economía que más commodities consume en el mundo, y especialmente relevante en el caso del cobre.

Pese a esto, el precio del cobre y otros commodities se ve estable en el corto plazo, y muestra buenas perspectivas para el mediano. En el ámbito local, la minería sigue siendo el principal motor de la economía nacional, y se está viendo afectada por la judicialización de los permisos ambientales, una excesiva burocracia y, eventualmente, algunas modificaciones propuestas en el proyecto de reforma tributaria.

“En general, hemos tenido un principio de año y fines del año pasado más auspicioso. Yo creo que este país ha recibido además buenas noticias de parte de los inversionistas y las grandes compañías mineras que están acá en el país”, afirma Joaquín Villarino, presidente ejecutivo del Consejo Minero. Se refiere a los anuncios de proyectos por parte de Collahuasi, Antofagasta Minerals, Codelco, Teck, BHP, Freeport-McMoran y Anglo American. “Hay movimiento, hay buenas noticias, porque hay decisión de llevar a cabo inversiones”, agrega.

“¿Por qué está ocurriendo esto y no ocurrió antes?”, se pregunta Villarino. “Estamos viendo un precio del cobre más firme, fundamentalmente, en general los commodities más sólidos, y el cobre no es una excepción”, plantea.

“Las cifras de crecimiento de China son menos de las esperadas, pero siguen siendo auspiciosas”, continúa Villarino. “En general todos los analistas serios piensan que vamos a tener una demanda sostenida de cobre por parte de China, que consume el 50% del mundo, fenómenos como la electromovilidad sin duda van a tener un impacto en sostener o incrementar esta demanda”, explica.

Las proyecciones de precio para este año también son auspiciosas, indica Villarino, empinándose hasta US$ 3,8 la libra, según Leonardo Suárez, de LarrainVial. “Hay fundamentos para pensar que el mercado del cobre debiera mantenerse firme, y eso es lo que justifica la decisión de llevar a cabo proyectos grandes”, agrega.

Guerra comercial

Las guerras comerciales nunca son buenas para la economía mundial. Pueden tener ganadores transitorios y muy puntuales de corto plazo, pero en el mediano y largo suelen producir un efecto negativo en los mercados, porque los distorsionan”, opina Villarino sobre le conflicto entre Estados Unidos y China. De todos modos, dice, el mercado del cobre ya estaría viendo los efectos de esta guerra, afectando los precios. Por otro lado, la demanda de cobre por parte de China estaría enfocada en el consumo interno más que en la exportación, por lo que una eventual guerra arancelaria no afectaría mayormente dicha demanda, afirma.

Modificación del SEA

“Existe un diagnóstico transversal. Yo no conozco a nadie, de izquierda, de centro y de derecha, del mundo empresarial, del mundo de los trabajadores, de donde ustedes lo miren, que no diga que hay que reformar el Sistema de Evaluación Ambiental. Es unánime”, dice Villarino.

Reforma tributaria

“El Gobierno pone un proyecto de ley para reformarlo y se niegan a la idea de legislar”, alega Villarino. “Al final es una ecuación de suma cero que no entendemos”, agrega, y afirma que es lo mismo que ocurre con el tema tributario. “La verdad es que es un poco incomprensible esta decisión de parálisis cuando el lugar natural para discutir e intercambiar ideas, entendemos que en un sistema democrático como el nuestro, es el Congreso”, expresa.

“Es una mala idea”, dice frontal sobre la propuesta de cobrar un 1% de los proyectos de inversión para las arcas regionales, un gravamen adicional para una industria que ya tiene una carga tributaria cercana al 41%, afirma. “Esto es un tributo, al final. No nos perdamos”, señala, “lo que no quiere decir que no haya que dejar más renta en las regiones”. Hay que fortalecer los ingresos de las regiones donde se genera la renta, opina, “pero no cargándole más la mano a la industria minera”.

“Lo que no puede ser es que tengamos una reforma para decir que tuvieron reforma. Es como un proyecto para la foto”, acota.

Villarino se refiere también a las iniciativas para optimizar el uso de agua en minería, como la desalación de agua de mar, y a la inclusión de la mujer en la minería, una industria históricamente dominada fuertemente por hombres. “Este es un sector que tradicionalmente ha sido masculino”, reconoce, aunque destaca la oportunidad para la participación femenina que se abre con la tecnologización. “El perfil de nuestros trabajadores va a ir cambiando, más rápido que lento, y por lo tanto se abre un espacio gigantesco para la incorporación de mujeres”, asegura.

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