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El cambio en Desarrollo Social: entra Karla Rubilar, sale Cristián Monckeberg

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POR Matias Bobadilla |

La ministra -cuyo nuevo cargo sería “un sueño hecho realidad” para ella- deberá centrarse en transmitir la imagen de un Gobierno con sentido de urgencia en la ayuda social.

¿Por qué se va?

Cristián Monckeberg estuvo un mes y 24 días en la cartera de Desarrollo Social. Venía desde el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, donde estuvo poco más de dos años, desde que partió la administración de Sebastián Piñera. 

Llegó a su segundo ministerio con el fin de integrar el Comité Político y contribuir en la coordinación entre el Gobierno y los partidos, a días de iniciar el proceso en el que se logró el acuerdo por la reactivación económica y la asistencia a las familias. Su estilo, su pasado como hombre fuerte de Renovación Nacional y la relación con la oposición lo dotaban de las características necesarias para enfrentar ese momento desde el círculo de hierro del Mandatario.

Aquel envión no duró tanto, pues un mes y medio después fue señalado como uno de los varios responsables del fracaso del Gobierno en el Congreso, al no alinear a la coalición para contener los votos en el retiro del 10% de los ahorros previsionales. Su enroque, sin embargo, se explica más por la renuncia del ministro que ocupó la oficina a la que Monckeberg llega ahora.

El extimonel de RN tendrá que desplegar su estilo dialogante en la Secretaría General de la Presidencia, cuyo antiguo titular, Claudio Alvarado, dejó vacante como un gesto al exministro Gonzalo Blumel y con el fin de dedicarse a asuntos de su vida personal, en Chiloé.

¿Quién llega?

A Desarrollo Social llega Karla Rubilar, la exvocera de Gobierno y antigua intendenta de la Región Metropolitana. Fue de las mejores evaluadas en el gabinete, pero no tuvo un rol tan relevante en las coordinaciones con los partidos y con la misma coalición. 

En los últimos meses, y sobre todo a partir de la pandemia, ha cobrado especial protagonismo en las vocerías en conjunto con el Ministerio de Salud o la Subsecretaría de Prevención del Delito. Recientemente se hizo cargo del impasse que el Gobierno sufrió cuando se conoció el instructivo de publicación de entrega de cajas de alimentos que la Secretaría de Comunicaciones, dependiente de su cartera, había difundido.

Aquello no le valió el cargo y más bien su designación en Desarrollo Social es “un sueño hecho realidad”, según cuentan quienes la conocen. 

Principales prioridades

Con un estilo más bien cercano y dialogante, además de estar bien evaluada entre quienes integran el gabinete, la ministra Rubilar ya expuso su principal desafío: “ir con urgencia en ayuda de quienes más nos necesitan”. Desarrollo Social ha tenido un rol protagónico durante la pandemia, gestionando varios de los beneficios económicos entregados a propósito de las consecuencias que el Covid-19 dejó en el país, como el Ingreso Familiar de Emergencia, el bono Covid y los millones de cajas de alimentos repartidos.