Actualidad

Los desafíos a contrarreloj que deberá enfrentar la nueva Mesa Directiva de la Convención

Imagen principal
Convención Constitucional
POR Paul Follert |

La segunda etapa de trabajo estará centrada en la ejecución del cronograma, la discusión de normas, la realización de los mecanismos de participación y el plebiscito de salida.

Quedan seis meses para que la Convención entregue una propuesta constitucional que será sometida a un plebiscito de salida. Se trata de un período que estará marcado por el trabajo y la votación de normas constitucionales que deberán aprobarse por el cuórum de dos tercios para ser incluidas en la nueva Carta Fundamental.

Ahí precisamente estará uno de los principales desafíos de la nueva Mesa Directiva: lograr acuerdos amplios entre los colectivos para llegar al cuórum necesario.

El tiempo apremia y la mayoría de los convencionales están conscientes. Por eso, un punto central será ejecutar los procesos que aún están pendientes en el cronograma. En este grupo destaca la Consulta Indígena, que ha tenido una serie de problemas relacionados con atrasos y dificultades para llegar a acuerdos en la Comisión de Pueblos Originarios, que es precisamente el espacio encargado de diseñar y llevar a cabo el proceso. 

Semana territorial

Asimismo, deberán acompañar el proceso de participación ciudadana a través de las iniciativas populares de norma. Y existe cierto consenso entre los convencionales de que hay una necesidad importante de potenciar la comunicación de este proceso, ya que aún hay muchas iniciativas que no han logrado las 15 mil firmas necesarias para ser discutidas en la Convención. De hecho, hasta el cierre de esta edición, solo tres iniciativas habían logrado los requisitos necesarios. 

{{noticia:121472}}

En tanto, el jueves 20 de enero termina el período de ingreso de iniciativas populares, mientras que el martes 1 de febrero finaliza el plazo para patrocinar las iniciativas.

Una de las primeras tareas de la nueva Mesa será orientar el trabajo de la semana territorial de enero, que estará enfocada justamente en informar sobre el proceso de iniciativas populares. Ahí será esencial elaborar una estrategia comunicacional que permita acercar el debate de la Convención Constitucional a la ciudadanía. 

Comunicar mejor

Un trabajo que ha sido dificultoso. De hecho, fue la propia expresidenta Michelle Bachelet, quien durante su visita al Congreso Nacional sede Santiago recomendó a los convencionales comunicar mejor la labor que están realizando. 

En ese contexto, algunos constituyentes ya han planteado la necesidad de ampliar el período de funcionamiento de la Convención entre tres a seis meses. La nueva directiva deberá analizar dicha idea y, en caso de prosperar, tendrá que conversar con el Congreso para aprobar una eventual extensión del plazo. Sin embargo, dicha reforma se ve lejana debido a la composición del nuevo Parlamento. Lo mismo ocurre con la reforma que daría luz verde a la realización de un plebiscito dirimente, un mecanismo que, si bien quedó establecido en los reglamentos de la Convención, está amarrado a una reforma en el Congreso.

{{noticia:123690}}