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Qué se frustra con la cancelación de la cumbre de APEC

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Agencia Uno
POR Eduardo Olivares |

La cita de líderes ocurriría en el país entre el 16 y 17 de noviembre. El Presidente Piñera anunció su suspensión debido a la crisis en las calles. Pero el trabajo de APEC se mantiene.

Solo una vez en Chile se han reunido los máximos líderes mundiales: fue en 2004. Ricardo Lagos presidía el país. Llegaron George W. Bush (Estados Unidos), Hu Jintao (China), Vladimir Putin (Rusia), Junichiru Koizumi (Japón), entre muchos más. Lo consiguió la cumbre de APEC, ese foro que reúne a 21 economías del Asia Pacífico.

En 2019 se reiteraría esa opción de un Chile vitrina para el mundo. En La Moneda habían labrado ese camino con paciencia, pues el Presidente Sebastián Piñera sería el anfitrión de los nuevos líderes (solo Putin se repetiría) en medio de un perfil que lo llevó a codearse con varios de ellos y de los mandatarios europeos en otras cumbres, como la del G-7 o G-20.

Ya no.

Debido a la convulsión social de las últimas semanas, el Jefe de Estado anunció la cancelación de la cumbre de APEC y también la que permitiría la celebración en Chile de la COP25.

Qué es APEC

APEC no es una organización como Naciones Unidas o como el Fondo Monetario Internacional. No tiene una presidencia o una dirección ejecutiva con una estructura burocrática como sucede con esas otras instituciones mutlilaterales. Es, como su propia sigla lo señala, una estructura destinada a la conversación y negociación. Así se le llama: “Foro” de Cooperación Económica del Asia Pacífico.

Las primeras reuniones de lo que conocemos hoy como APEC fueron en Australia, en 1989, con una docena de países interesados en la integración comercial en las postrimerías de la Guerra Fría. Sus fundadores fueron Australia, Brunéi Darussalam, Canadá, Corea del Sur, Estados Unidos, Filipinas, Indonesia, Japón, Malasia, Nueva Zelanda, Singapur y Tailandia. Se trataba de economías con orientación liberal.

El gobierno dirigido por Deng Xiaoping mostró un interés inmediato. Y pujó para que China (la República Popular) fuese parte de ese bloque del futuro. El Reino Unido, que aún mantenía a Hong Kong como su colonia, buscó también la membresía. Así, APEC se convirtió en un caso excepcional donde conviven “tres Chinas”: la República Popular de China (reconocida por la ONU como la única representante de ese país), la República de China (más conocida como Taiwán, pero considerada por Beijing como una provincia rebelde) y Hong Kong (que hoy es una Región Administrativa Especial de la República Popular de China).

Líderes, no mandatarios; economías, no países

Debido a las “tres Chinas” es que no se puede hablar de mandatarios ni de países en el lenguaje de APEC. Ocurre que Beijing no reconoce (ni otros países tampoco) a Taiwán como Estado, y mucho menos a sus mandatarios como presidentes legítimos.

Así se llegó al consenso del lenguaje: se habla de “líderes” y se habla de “economías”. 

Cuándo entró Chile

APEC se mantenía como un club más bien asiático, con Estados Unidos y Canadá desde las Américas. Pero si se trataba del Pacífico, faltaban socios.

El primero de esta región fue México, que entró al foro en 1993 (junto con Papúa Nueva Guinea), mismo año de la primera Cumbre de Líderes, en Estados Unidos. Tras numerosas gestiones, finalmente fue bajo la presidencia de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, en 1994, cuando Chile ingresó. Ya en 1998 se cerraría el club con la llegada de los últimos socios hasta ahora: Perú, Rusia y Vietnam.

No hay puerta abierta para nuevos miembros, pese a que Colombia e India desde hace años desean convertirse en las economías 22° y 23° del foro.

Por qué importa

Los números se reiteran cuando se habla de APEC: que sus economías representan el 60% del Producto Interno Bruto (PIB) del mundo, el 45% del comercio global, el 38% de la población humana.

Chile, en particular, ha utilizado el foro para generar acercamientos relevantes en las tratativas comerciales que hoy lo tienen como una de las economías con la mayor red de tratados de libre comercio (TLC) del mundo. Sin APEC, los TLC con Corea del Sur, China o Japón hubiesen sido más difíciles de conseguir.

En APEC también nacieron los primeros capítulos de lo que hoy se conoce como TPP11.

También resulta útil por las mesas de negocios que establecen los empresarios de las economías del bloque. A ese grupo se le denomina ABAC. Entre los logros obtenidos está la creación de la visa Apec Business Travel Card.

Qué se frustra con la cancelación de la cumbre de APEC

La primera frustración es política. El Presidente Piñera había apostado no solo a recibir a los líderes de APEC, sino a dos aspectos específicos: plantear una declaración que abriera una ruta para destrabar las complicaciones actuales al comercio y al rol de la Organización Mundial del Comercio (OMC), y también ser la sede de una eventual firma entre Donald Trump (Estados Unidos) y Xi Jinping (China) para superar la Guerra Comercial que ha golpeado a la economía del mundo, incluido Chile, el último par de años.

La segunda frustración es simbólica. Desde el inicio de las cumbres de líderes, en 1993, nunca se había cancelado. Ha habido cumbres en lugares con vibrante democracia (Canadá, EE.UU., Japón y otros) y con regímenes no democráticos (China, Singapur y Brunéi, por ejemplo). Chile anotó esa gota de decepción. Y eso tiene un alto costo de imagen.

Una tercera frustración, o más bien un daño severo, es la dimensión económica: cancelaciones de hoteles, EspacioRiesco que ya no será utilizado, empresas de banquetería y otra serie de emprendimientos relacionados con la actividad, se quedarán sin ingresos.

Pero APEC, como foro, no se frustra.

En rigor, APEC es un foro que tiene eventos durante todo el año. Chile ya ha sido anfitrión de reuniones de altos representantes, de ministros de Finanzas, de ministros de Energía y de consorcios de universidades, entre una agenda muy diversa.

De hecho, los altos representantes (SOM, se les llama) han tenido reuniones y las seguirán teniendo, ya sea en Chile o a distancia. Buena parte del trabajo de APEC es, de hecho, a distancia, con el secretariado de APEC como centro orgánico de distribución.

Se discute sobre iniciativas para liberalizar el comercio y, según avanzan los años, en la agenda entran materias como la inclusión, el papel de las mujeres o la protección al medioambiente. Los temas puestos por Chile eran la sociedad digital, integración 4.0; mujeres, pymes y crecimiento inclusivo, y crecimiento sustentable

Cuando Chile fue anfitrión de APEC en 2004, el eslogan fue “Una comunidad, nuestro futuro”. El eslogan aprobado por Piñera para APEC Chile 2019 es “Construyendo el futuro”.

Nota: texto basado en un artículo de este autor para el Observatorio Internacional de la Facultad de Humanidades y Comunicaciones de la Universidad Finis Terrae.