Salud y Bienestar

Rezum: la terapia prostática que resguarda salud y calidad de vida sexual

Imagen principal
POR Hans Ulloa |

[Colaboración patrocinada]

¿Sabía usted que al menos 30% de los hombres mayores de 45 años necesitarán hacerse un tratamiento médico por algún tipo de patología prostática? La más común de ellas es la Hiperplasia prostática benigna (HPB), cuyos síntomas más repetidos son la alteración en el calibre y fuerza de la orina, dificultades para iniciar la micción y un marcado aumento en la frecuencia.

“La HPB es el crecimiento de la glándula prostática de los hombres que manifiesta con una obstrucción del conducto de la orina, causando dificultad creciente para ir al baño. Si bien es un problema benigno, igualmente genera mucha preocupación ya que impacta directamente en la calidad de vida de los pacientes”, explica el doctor Pablo Díaz, jefe médico de Urología de RedSalud Providencia.

Históricamente, los tratamientos asociados a la HPB han generado resistencia entre los hombres. “Técnicas como el láser son muy efectivas, pero invaden aspectos de la vida sexual de los pacientes. Como el fenómeno conocido como ‘eyaculación retrógrada’, que es la incapacidad de expulsar semen en el orgasmo masculino”, explica el doctor Díaz, que lleva más de 20 años tratando este tipo de casos.

Y fue en búsqueda de una mejor solución para este problema, que comenzó a implementarse la terapia Rezum. Una técnica relativamente nueva, que combate la HPB de manera rápida y poco invasiva. Consiste en la inyección de vapor de agua directamente sobre el tejido hiperplásico que provoca la obstrucción, con el objetivo de ampliar el calibre de la uretra, lo que a la larga elimina los síntomas.

“En poco menos de 3 meses los resultados son comparables a los de una cirugía tradicional con láser. La gran ventaja del Rezum, es ser mínimamente invasivo, de carácter ambulatorio y que preserva la esfera de la vida sexual de la persona intervenida”, comenta el doctor Díaz, quien realiza este tipo de procedimientos en RedSalud.

“Una vez aplicado el Rezum, el paciente necesita estar unos días en su casa con una sonda para orinar. Pero terminado este proceso, se puede volver sin problemas a las actividades cotidianas y sin el fantasma de la afectación de la vida sexual”, sentencia el especialista.

El Rezum tiene un valor similar a la técnica con láser. El procedimiento está indicado para hombres con próstata de un volumen menor a 80 gramos, cuyos síntomas de HPB no sean graves, los que, según el doctor Díaz, corresponden a la inmensa mayoría de los hombres que desarrollan esta patología.