Economía

CChC: alza en precios de insumos encarece viviendas y pone en riesgo proyectos

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CChC
POR Santiago Parro |

El gremio pidió medidas ante encarecimiento de 14% en casas y 17% en departamentos. Ya hay 23 proyectos de infraestructura pública con problemas de continuidad por esta causa.

Una serie de factores llevaron a la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) a ajustar a la baja su proyección de inversión sectorial para 2022. Si a principios de año proyectaba que la inversión del rubro podría caer hasta 1,9% anual, ahora prevé que el escenario más probable es que se contraiga al menos 3% en comparación con 2021.

Según explicaron desde la CChC (entidad controladora de PAUTA), en el ajuste a la baja influyen tanto factores internacionales (como el estrés de la cadena de distribución) como locales, los que incluyen el aumento de la inflación y las tasas de interés, un contexto que no incentiva las decisiones de inversión del sector privado  y la incertidumbre existente en el ámbito económico.

“Tal como la economía, la construcción también se está desacelerando y sus proyecciones se han deteriorado”, alertó el presidente del gremio, Antonio Errázuriz, precisando que este escenario es aun más complejo debido al peso que esta industria tiene en la actividad económica y el empleo. Por ello, dijo, “hoy se requiere más que nunca el trabajo conjunto entre el sector público y el privado para salir adelante”.

Impacto de la Inflación y mayores tasas 

Javier Hurtado, gerente de Estudios de la CChC, explicó que los precios de los materiales de construcción aumentaron en un año entre 26% y 33%; es decir, casi cuatro veces más que el IPC acumulado. Los mayores precios de los insumos se han traducido en mayores costos de construcción. En el caso de los proyectos de viviendas en altura, este mayor costo es de 17% anual, y de 14% anual tratándose de casas.

Junto con ello, si se combina el aumento de la inflación, el alza de las tasas que fija el Banco Central y los menores plazos para los créditos hipotecarios, se tiene que la tasa de interés de los créditos para la vivienda casi se has duplicado en un año.

Hurtado dijo que entre febrero 2021 y febrero 2022, el monto del dividendo mensual por un crédito de 1.600 UF para comprar una vivienda de 2.000 UF aumentó en casi $138.000 (de $181.044 a $318.716) por el efecto combinado de mayor tasa de interés y menor plazo para el pago. En el mismo período, precisó, el ingreso familiar mínimo exigido para este crédito aumentó en poco más de $500.000.

Esto ha hecho que en el mismo período el flujo de colocaciones de créditos para viviendas haya disminuido en casi 60% y que para este año se proyecte una contracción de las ventas inmobiliarias de 23% en Santiago y de 24% en el resto del país.

Uno de los efectos complejos del encarecimiento de los insumos ya hay 23 proyectos de infraestructura pública por US$413 millones con problemas de continuidad, dijo Hurtado. Se deben encontrar mecanismos que corrijan esta situación, afirmó.

Agenda pública-privada

Este panorama es preocupante para el gremio, que se ha comprometido a trabajar activamente para terminar con los campamentos y reducir el déficit habitacional. Por ello solicitaron revertir la caída tanto de los susbidios otorgados como de los subsidios usados o pagados, junto con abordar la sostenida alza de los costos de construcción en el corto plazo.

La gerenta general del gremio, Paula Urenda, advirtió que la imprevista y extraordinaria alza de los costos de construcción afecta a todos los programas de la política habitacional. “Esta situación se hará aún más compleja con la próxima eliminación de Crédito Especial a Empresas Constructoras, que provocará un aumento adicional de costos de construcción de 12% anual, aproximadamente“, señaló.

Asimismo, plantearon la necesidad de impulsar la inversión privada y el crecimiento económico, y fortalecer la alianza público-privada. “El Presidente y distintos ministros la han respaldado, pero desde la Convención Constitucional han surgido propuestas que va en sentido contrario. El Estado, por sí solo, no podrá responder a las necesidades y expectativas de las personas”, advirtieron.

También sostuvieron que se debe evaluar en su conjunto los impactos de las reformas tributaria y laboral. “Las empresas recién se están recuperando de la pandemia y se vienen años difíciles en materia económica. Un acelerado aumento de costos puede terminar afectando a los mismos grupos que se busca apoyar”, detalló el gremio.