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Enojo, respaldo y abstención: líderes mundiales reaccionan tras el asalto al Capitolio

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Bloomberg
POR Francisca Vargas |

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, hizo un llamado para instar a los estadounidenses a “pensar en lo que el resto del mundo está mirando”.

Líderes de todo el mundo expresaron decepción y enojo por los disturbios del miércoles en Washington y advirtieron que Estados Unidos tiene mucho trabajo por hacer para seguir siendo un ejemplo de los valores democráticos que ha defendido.

“Durante toda mi vida, EE. UU. ha representado algunas cosas muy importantes, la idea de libertad y una idea de democracia”, dijo el jueves el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, después de que partidarios del presidente Donald Trump irrumpieron en el edificio del Capitolio e interrumpieron el voto de confirmación de la victoria electoral de Joe Biden.

“En la medida en que alentó a la gente a asaltar el Capitolio, y en la medida en que el presidente siempre ha puesto en duda el resultado de una elección libre y justa, considero que fue totalmente incorrecto”, señaló. “Condeno sin reservas incitar a las personas a comportarse de una forma tan vergonzosa como lo hicieron en el Capitolio”.

La canciller alemana, Angela Merkel, expresó enojo y tristeza por las imágenes de Washington. “Lamento mucho que desde noviembre, el presidente Trump no haya reconocido su derrota”, dijo a periodistas en Berlín. “Se sembró la duda sobre el resultado de las elecciones y eso generó una atmósfera propicia para los eventos de ayer”.

“Los actos de vandalismo en el Capitolio fueron vergonzosos y deben ser condenados enérgicamente”, dijo el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, durante una reunión con el secretario del Tesoro de EE. UU., Steven Mnuchin. “No tengo dudas de que la democracia estadounidense prevalecerá, siempre lo ha hecho”.

Sus comentarios se produjeron después de que Biden, cuya victoria fue confirmada por el Congreso el jueves por la mañana, utilizó una aparición en televisión para instar a los estadounidenses a “pensar en lo que el resto del mundo está mirando” cuando ve las escenas caóticas en Washington.

El premier ministro checo, Andrej Babis, también un empresario multimillonario convertido en político, removió su foto de perfil de las redes sociales en la que llevaba una gorra de béisbol roja que imitaba el eslogan del presidente estadounidense “Make America Great Again”.

“Es cierto que me sentí inspirado por Trump”, dijo Babis al sitio web de noticias checo Idnes.cz. “Después del ataque sin precedentes a la democracia que ocurrió en Estados Unidos, que condené inequívocamente, me pareció apropiado expresar mi postura cambiando también mi foto de perfil”.

Por otro lado, algunos líderes en términos amistosos con Trump minimizaron sus comentarios.

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo a sus seguidores fuera del palacio presidencial en Brasilia que respaldaba a Trump. Bolsonaro ha sido un firme defensor del presidente estadounidense, abandonando el enfoque multilateral de Brasil en materia de política exterior para alinear completamente a su país con EE. UU.

“Sabes que estoy conectado con Trump, sabes mi respuesta”, dijo, y agregó que “han habido muchos reportes de fraude” en las elecciones estadounidenses. Bolsonaro también dijo que creía que las elecciones brasileñas de 2018, las cuales ganó en una segunda vuelta, estuvieron plagadas de fraude. “Hubo fraude en la mía. Tuve que haber ganado en la primera ronda”, señaló.

El jueves, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo que no tomaría una posición sobre la toma del Capitolio porque no quería interferir en los asuntos internos de otra nación, pero indicó que se oponía a que se privara a cualquiera del derecho a enviar mensajes a través de Twitter o Facebook. “Una cosa que no me gustó del Capitolio, y con el debido respeto, pero no me gustó la censura”.

Mientras tanto, China aprovechó la oportunidad para llevar a casa una narrativa de “hipocresía estadounidense”, y los medios estatales calificaron la situación como “retribución” por el apoyo de Washington a los movimientos de protesta globales.

El presidente de Irán, Hassan Rouhani, dijo en una declaración en los medios estatales que el drama en el Capitolio “nos muestra cuán débil y flácida es la democracia occidental”, agregó que Trump, quien rechazó un acuerdo con Irán sobre su programa nuclear y tuvo una relación altamente antagónica con Teherán “restó dignidad a su país”.

“Yo esperaría que esto sirva como una lección para todo el mundo y para los próximos gobernantes de la Casa Blanca, y que aquellos que lleguen en dos semanas y tomen el poder, lo compensen, que regresen al pueblo estadounidense a donde debería estar”, comentó.