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CEP: las interpretaciones de la encuesta que reprobó toda la clase política

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POR Gerardo Gómez |

Ricardo González, coordinador del área de opinión del CEP, analizó el bajo respaldo presidencial, las prioridades de la ciudadanía y el diálogo como vía de salida a la crisis.

El 6% de apoyo popular del Presidente Sebastián Piñera y el 82% de rechazo a su gestión obtenido en la última encuesta CEP es solo el reflejo del mal momento de la clase política en general y donde nadie es capaz de transformarse en excepción. Todos los personajes anotaron una baja y la confianza en ellos llegó al 2%.

El coordinador del área de Opinión del Centro de Estudios Públicos (CEP), Ricardo González, dijo en Primera Pauta que el histórico 6% del Presidente Piñera no se transforma en algo tan atípico ni aislado si se compara con lo ocurrido en otros países en momentos de crisis. “En general la experiencia internacional muestra que las evaluaciones presidenciales tienden a pasar por períodos de muy bajos niveles. Esto lo hemos visto en todos los gobiernos desde el retorno a la democracia […] ahora estamos hablando de niveles muy bajos […] en el caso chileno, cuyo sistema de gobierno es muy presidencialista, hace que todos los problemas repercutan en la figura del presidente”, aclaró.

Sobre la lista de prioridades de los chilenos, cuyo orden se alteró desde el inicio de la crisis, González lo atribuye a la influencia del entorno y la manera en que se informa. Hay muchas personas que experimentan esos problemas que están en boca de todos, como por ejemplo el de las pensiones, aunque los problemas personales son diferentes a veces a los del país, menciona el vocero de CEP. Otro ejemplo es la diferencia de percepción entre la situación económica personal y la que se tiene del resto.

Un 78% de los encuestados quiere acuerdos para que se solucionen los problemas de la agenda que, asume González, se espera sean solucionados de la mano de las elecciones; pero no será fácil, porque se da en un contexto de desconfianza hacia las instituciones.

Sobre la gente que optó por salir a protestar, hay una clara evidencia generacional sobre quienes apoyan y justifican esta vía, destaca González. “Los más jóvenes tienden a justificar estas formas no institucionales para manifestarse, o más violentas, como uso de barricadas, evasión del transporte público […] Asimismo las emociones experimentadas durante la crisis, también hay diferencias generacionales. Los jóvenes estaban más enojados en un inicio y al revés pasó con los mayores, que ahora están más enojados que al inicio”, precisó.

Pablo Velozo, exsecretario general del Partido Socialista, y Álvaro Pezoa, doctor en filosofía y director del Centro de Ética Empresarial de la Universidad de Los Andes, panelistas de Primera Pauta, también analizaron la encuesta. Velozo cree que el Presidente Sebastián Piñera tiene una oportunidad para empezar a hacer las cosas bien a través del cumplimiento de sus compromisos tras la crisis, mientras para Pezoa lo preocupante es la falta de valoración general de las instituciones. “Viene a ratificar un fenómeno ya analizado” sobre la inexistencia de líderes políticos relevantes, menciona.

Escuche a continuación la conversación de Ricardo González con Primera Pauta: