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Giorgio Jackson: “Gabriel Boric va de menos a más. Hasta ahora no ha tocado techo”

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Agencia Uno
POR Gladys Pierola |

El diputado de Revolución Democrática asegura que la campaña presidencial del Frente Amplio es más convocante que la del Partido Comunista. “Es una contienda que vemos supercompetitiva y que va a ser difícil”, dice.

Para el diputado de Revolución Democrática, Giorgio Jackson, la contienda del 18 de julio puede resultar una sorpresa a favor de su candidato presidencial y amigo, Gabriel Boric. Según el parlamentario, la alianza que se ha formado en Apruebo Dignidad tiene bastantes coincidencias respecto a la dirección en que deben ser las transformaciones de nuestro país; sin embargo, asegura que para la oposición la carta presidencial del Frente Amplio (FA) es más convocante que su contendor comunista, Daniel Jadue.

Jackson dice en entrevista con PAUTA que en las primarias el FA se juega el liderazgo del sector y también las transformaciones profundas al sistema económico y político que fueron expresadas en el estallido social, pero con tranquilidad y estabilidad. “Nosotros vamos a desplegarnos con todas nuestras capacidades para convocar a la mayor cantidad de gente, porque de eso también depende que más posibilidades tengamos de pasar a la elección de noviembre”, explica. 

-Se ha hablado del tono fraternal y las coincidencias entre Boric y Jadue, pero hoy desde la mirada del Frente Amplio, ¿cuáles son las diferencias más importantes entre los dos proyectos?  

“Hay diferencias que van en el fondo y en la forma. En el fondo, desde la candidatura de Gabriel Boric hay una mirada de una izquierda que tiene un énfasis muy fuerte en el tema medioambiental, en la crisis climática. Creo que esta candidatura está muy permeada por el activismo medioambiental y eso se nota. También está muy permeada por la agenda feminista y el activismo que es muy característico de la militancia frenteamplista. Además, hay una mirada muy descentralizadora y eso también es un sello particular respecto de las ideas de fondo de cómo gobernar”.

“La candidatura de Gabriel, también, no tiene ningún problema con plantear las reformas radicales de fondo y al mismo tiempo tener claro que se necesita hablar sobre crecimiento y no solo sobre distribución. En eso, sin duda, vamos a tener muchos puntos de encuentro con la candidatura de Jadue en la importancia de redistribuir, pero en relación con la generación de riqueza, creo que la candidatura de Gabriel Boric y sus equipos programáticos han puesto harto foco en la reactivación económica con esta mirada verde, morada y descentralizada. Además de una mirada tecnológica, del siglo XXI y digital. En eso la campaña también marca diferencias. Más allá de todas las coincidencias que puede haber en derecho a la vivienda, en temas de educación, salud, no más AFP, etc, estos énfasis son representativos de una izquierda del siglo XXI y no los aspectos tan clásicos y tradicionales de la izquierda”. 

-¿Y cuáles son las diferencias de forma?

“Veo a Gabriel diferenciándose de Daniel por sus trayectorias. Tienen distintas historias, desde donde vienen, tienen diferentes matrices ideológicas en términos desde donde han construido. Gabriel emergió desde los movimientos sociales y el movimiento estudiantil y menos desde un aparato partidario. Y, por supuesto, la capacidad de diálogo y de apertura. La capacidad de liderar con convicción, pero nunca despreciando la duda, sin creer que se las sabe todas. Creo que eso es súper característico de Gabriel y en ese sentido es un liderazgo, desde mi punto de vista, más convocante que es capaz de buscar los puntos de encuentro en esa línea de transformación”.

Los votos clave

-Boric suele decir que le habla a una izquierda más amplia, a los que votaron por el Apruebo, y de alguna manera, también, a los huérfanos de la centroizquierda que no tienen primarias legales. ¿Ustedes apuntan a esos adherentes de la ex-Concertación que podrían encontrar un nicho en esta candidatura?

“El discurso de Gabriel siempre ha sido convocar a todos y todas los que se sienten de oposición a este gobierno. Eso ha sido siempre un borde y, por otro lado, a quienes creen en las transformaciones que proponemos en nuestro programa. Eso es una guía, por lo tanto, el llamado es a todas y todos los que se apuntan en ese programa. Hace cuatro años ese programa convocó al 20% de la población y el PC estaba al otro lado con la Nueva Mayoría y con la candidatura de Alejandro Guillier. No proponían las cosas que estamos proponiendo ahora y tampoco proponían las cosas que ellos están abordando ahora, ellos estaban con otro programa. Por lo tanto, la convocatoria de Gabriel más que llamar a la centroizquierda, izquierda o izquierda radical, convoca a un gran mundo de quienes se sienten de oposición, a quienes no quieren cambios simplemente, sino que quieren cambios radicales, pero que también permitan un horizonte de tranquilidad y de estabilidad. Creo que eso es algo que Gabriel es capaz de transmitir, porque su programa plantea una transformación muy importante, pero al mismo tiempo es consciente de que eso incorpora la estabilidad”. 

Pero con la ausencia de la centroizquierda en la papeleta del 18 de julio y los miedos de algunos sectores al voto “anti-Jadue”, ¿hay cálculos de cuánto este escenario podría beneficiar a la candidatura de Boric?

“Los votos no son propiedad de nadie, así como no lo son de Boric o de Jadue, tampoco lo son de otras coaliciones. Las personas que han ido a votar durante los distintos procesos electorales han ido por las opciones que habían, por lo tanto, creemos que hoy ese electorado es un público que puede sentirse muy interpretado por las posturas de Gabriel, pero eso no significa que sean votos pertenecientes a otros lados. Hay un grupo mayoritario de independientes que puede ir a votar y nadie es dueño de esos votos. Es obvio, que cuando fuerzas emergentes que llegan al escenario político, esos votos vengan de algún lado. Las personas que votan tienen trayectoria hacia atrás y eso en este caso es irrelevante para el objetivo del futuro. Nosotros estamos convocando para un proyecto, no respecto de cuál fue su votación en el pasado”.

-No se puede negar que incluso en la derecha están mirando ese cuadro, de eventuales apoyos que podrían ir a ustedes, pero que no son un voto duro del Frente Amplio.

“Nosotros estamos convocando a un mundo de oposición. Estamos convocando a un programa de transformaciones radicales al modelo económico actual, planteando una transformación verde que es central y también a los principios del feminismo, de la descentralización, por lo tanto, acá no estamos apelando a ningún voto ‘anti’ alguien. Nosotros si queremos llegar a ser gobierno tenemos no solo que pasar la barrera de la primaria, que, por supuesto, es una contienda que vemos supercompetitiva y que va a ser difícil, pero después lo que tenemos que hacer es ganar una primera y una eventual segunda vuelta. Así que no nos sirve ese llamado. Nosotros no estamos haciendo campaña pensando en los votos ‘anti’, sino en los votos a favor de algo y a favor del programa de transformaciones que ya presentamos una vez con Beatriz Sánchez y ahora con Gabriel Boric”.

De menos a más 

-¿Cuáles son las expectativas que manejan en el FA sobre la participación del 18 de julio?

“Estas primarias son muy distintas a las que han habido antes, porque probablemente quien gane las primarias en Apruebo Dignidad quede con una buena posición para la elección de noviembre. Es probable que el ganador sea el próximo Presidente de Chile, por lo tanto, creemos que hay mucho en juego y las personas van a participar bastante. Nosotros estamos aspirando a que haya una participación cercana al 30% del padrón total entre las dos primarias, que es bastante más de lo que hubo el 2017. Ese es un número de convocatoria que es perfectamente alcanzable si siguen estos índices de visualización de la franja y de los debates, porque en esa línea las personas parecen bastantes interesadas en formarse una opinión y tomar una decisión”. 

En la centroizquierda saben que no da lo mismo si gana Boric o Jadue, menos para la eventual candidatura de Yasna Provoste y el futuro de la campaña de Paula Narváez. El resultado de Apruebo Dignidad, ¿cuánto puede impactar la situación o modificar el futuro presidencial de la oposición?

“Sí, me imagino que hay un análisis a nivel de cúpulas partidarias y en las otras candidaturas. Pero para las grandes mayorías, que no están metidas en la decisiones partidarias y movidas tácticas, y para el mundo independiente es bastante nítido que Gabriel Boric ha ido de menos a más. Boric hace poco no tenía ni para juntar las firmas y lo logró con creces. Como Frente Amplio tuvimos buenos resultados en las últimas elecciones del 15 y 16 de mayo; además los debates y la franja han ido generando un entusiasmo que quizás no se preveía. Por lo mismo, creo que el techo de Boric y su capacidad de convocatoria, de cruzar ciertos marcos preestablecidos de los que están convencidos, es más grande. Por ejemplo, Lavín no menciona a Boric. Pareciera ser que no lo menciona porque lo cree un rival más difícil de encasillar, más difícil de poder vencer…”

-¿O lo considera más débil?, porque Lavín sabe que su rival más fuerte hoy es Jadue y apunta directo a él.

“Eso, al menos yo, lo miro con atención, esto de que en la franja de Lavín aparezca solo una candidatura de Apruebo Dignidad. Creo que Boric puede convocar más gente no solo para pasar a segunda vuelta, sino para ganar. Cada comando tendrá su análisis distinto, pero Gabriel Boric sin duda va de menos a más, hasta ahora no ha tocado techo y tiene un buen rato para seguir creciendo”.

El diputado Miguel Crispi (RD) dijo que el caballo no está pillado, haciendo referencia a la ventaja de Jadue, ¿pero lo van a pillar?

“Las encuestas siempre muestran una imagen que está un poquito desfasada, con números del pasado. Hemos venido acortando la brecha y la campaña ha ido ganando apoyo. La pregunta es si esas curvas se intersecan el 18 de julio o no. Nuestra apuesta es que sí. Vamos creciendo y a este ritmo con una campaña descentralizadora, verde y morada, que no tiene temor de hablar de reactivación, creo que podemos seguir creciendo y se puede superar los votos que Daniel Jadue puede tener el 18 de julio”. 

-Pero si no ganan, qué pasa al día siguiente. ¿Hay algunos temas del programa de Jadue que para el FA sería difícil de apoyar?

“El día 19 vamos a estar detrás de la candidatura que haya ganado y eso es súper importante ratificarlo. Habiendo dicho eso, me parece natural que después que una candidatura salga electa y también dependiendo de cómo se den los porcentajes, es que se tenga una conversación programática. Creo que ninguno de los programas en primarias están escritos en piedra. Por lo tanto, quien sea el ganador el 18 de julio va a tener que convocar a quien haya quedado en el camino para también hacerle gestos e incorporarlos. Esto corre para los dos lados. Cualquier candidatura debiese tener la madurez y la sapiencia política para poder incorporar los elementos del programa del otro y también para limar las asperezas que pudieran existir”.

-Por ejemplo, ¿la ley de medios que propone Daniel Jadue es uno de esos temas en que no hay coincidencia?

“Efectivamente, ese es un punto donde tenemos una diferencia significativa y me imagino que será uno de los temas que habrá que resolver, gane quien gane, y llegar a un punto común”.