Economía

Las desconocidas reuniones que precipitaron la corrección del IPC

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PAUTA/ Felipe Rojas
POR Marcela Gómez |

En medio de las dudas sobre la permanencia de Pattillo, PAUTA confirmó que fueron las advertencias de un organismo externo las que detonaron el cambio en el indicador.

Complejo se ha vuelto para el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) superar el error registrado con la variación de los precios de la electricidad en el IPC de enero. No solo porque es el segundo problema con un indicador que es clave en la economía en menos de un año, sino también porque las explicaciones entregadas no han convencido totalmente al mercado. Un nuevo elemento se suma ahora al cuadro: la independencia del INE.

Aunque en todas las comunicaciones del organismo sobre este caso se ha destacado que la falla fue detectada y rectificada internamente en el marco de sus políticas de mejora continua, nuevos antecedentes relativizan esa afirmación. Fuentes tanto del INE como de la industria de energía que pidieron reserva de su identidad confirmaron a PAUTA que la alarma sobre el error en el cálculo provino de la Comisión Nacional de Energía (CNE), organismo público encargado de analizar precios, tarifas y normas técnicas a las que deben ceñirse las empresas del sector. 

El INE confirmó a PAUTA que fue tras una reunión con técnicos de la CNE, realizada luego de la publicación del IPC de enero, que decidió revisar nuevamente sus cálculos y detectó el problema.

Esta nueva polémica ha hecho reflotar las críticas en contra del director del ente estadístico, Guillermo Pattillo, cuya permanencia está en duda.

La alerta

Según comentaron las fuentes consultadas por este medio, la CNE, que es liderada por el ingeniero civil José Venegas, se comunicó con el Ministerio de Energía el mismo viernes 7 de febrero en que se difundió el IPC para hacer ver el problema.

En esa cartera hubo coincidencia en que un alza de 3% en la electricidad no tenía base luego de que se congelaran las tarifas de transmisión, generación y distribución. Ello incluso podría generar un riesgo político para el Gobierno, ya que esa medida se anunció en medio de la crisis social. La información se entregó al Ministerio de Economía, del cual depende el INE.

Con este escenario de fondo, añaden las fuentes, el lunes 10 de febrero se concretó una reunión entre la CNE y el INE, en la cual también participó el ministro de Economía, Lucas Palacios.

En la instancia Guillermo Pattillo y el jefe (s) del Departamento de Estadísticas de Precios del INE, Marcelo Montes, explicaron cómo se efectuó el cálculo y sopesaron los reparos presentados por la CNE. La cita concluyó, coinciden las fuentes, con la necesidad de revisar y corregir el precio de la electricidad, cuya variación quedó finalmente en cero.

Desde la CNE y el Ministerio de Energía declinaron comentar su rol en este asunto, y afirmaron que la vocería del tema la tiene el INE. El Ministerio de Economía tampoco entregó una versión.

Desde el INE admitieron que “hubo una reunión con funcionarios de la CNE el martes 11 de febrero, donde más que alertarnos, plantearon algunas dudas y chequearon aspectos metodológicos de su forma de cálculo con la nuestra”. Añadieron que “a raíz de eso, el equipo IPC repitió los cálculos y, en vista de que estos seguían arrojando el mismo resultado, decidieron volver sobre los cálculos iniciales, donde se encontraron con el redondeo impreciso de uno de los ponderadores del precio de la electricidad”.

La Asociación de Funcionarios de la entidad (Anfine) criticó que se realicen “cambios metodológicos en productos estratégicos a razón de exigencias de otras reparticiones ministeriales que, ante nuestros resultados publicados, parecen haberse visto incómodos. Así pasó con las cifras de empleo durante el año 2019″. 

Debilidad institucional

La comunicación de lo que ocurrió ha sido a cuentagotas y las dudas persisten luego de un segundo comunicado donde se detalla cómo se realiza el cálculo del producto electricidad (que esta vez también se difundió vía email a la prensa y al mercado, a diferencia del primer comunicado, cuando ello no ocurrió). En el texto, se detalla que tras una revisión posterior a la publicación del IPC, se detectó que “era impreciso” el redondeo a cinco decimales “de un ponderador de participación de una empresa eléctrica en una comuna con una incidencia significativa en el cálculo final”.

La explicación no despeja totalmente las preocupaciones del mercado, ya que se estima “raro” que un error de redondeo a cinco decimales pueda cambiar una cifra final de 3% a 0%, que es lo que ocurrió con la electricidad. Pero tampoco descartan esa posibilidad. “No hay antecedentes suficientes para entender qué pasó. Podría haber escenarios en que ello sea posible, pero deberían ir asociados a errores gruesos como haber incluido los ponderadores como porcentaje (50%) cuando en realidad debía hacerse como proporción (0,5)”, dice un analista económico.

Conocedores del método de cálculo del IPC advierten que este tipo de errores dan cuenta de una debilidad en el equipo que está a cargo del IPC, que fue totalmente renovado tras la bullada denuncia de manipulación efectuada en mayo de 2019, que significó la suspensión del entonces jefe del Departamento de Estadísticas de Precios, Felipe López. Desde ese momento otros dos funcionarios fueron sumariados; un tercero, Cristian Díaz, renunció recientemente, y solo queda un experto en informática que conoce el producto ya que el otro se cambió a otra sección.

“Hay todo un equipo nuevo sin mucha experiencia en cálculo y validación. Además que no existen los contrachequeos que existían antes”, dice un funcionario. Añade que una revisión exigente revelaría otros problemas, como el hecho de que en el cálculo del producto paquete turístico del IPC no se eliminan los outliers o datos extremos, como indica el manual, y que nunca se entregó la nota técnica que detalló cómo se imputaron los precios que no se pudieron levantar en medio del estallido social.