El nuevo estilo y método de trabajo de Delgado para ordenar a Chile Vamos

El ministro del Interior tuvo su primera reunión con los presidentes de los partidos de la coalición. Les propuso reuniones periódicas, un chat de coordinación y citas bilaterales.

Casi una hora y media duró la primera conversación formal entre el nuevo ministro del Interior, Rodrigo Delgado, y los cuatro presidentes de los partidos de Chile Vamos. Una instancia de presentación, donde el exalcalde de Estación Central puso sobre la mesa una propuesta para mejorar la relación y la coordinación entre el Gobierno y la coalición.

De hecho, Delgado tomó distancia de lo que alguna vez se llamó “nuevo trato” y los esperó con una propuesta por escrito. Les planteó la idea de retomar citas semanales o quincenales -como propusieron algunos de los dirigentes- con los cuatro timoneles y también generar citas bilaterales, al menos una vez al mes, con cada una de las directivas de Chile Vamos “para escuchar los planteamientos específicos” de cada tienda. 

“Nos vamos con una grata sensación. Se van a reanudar reuniones con los presidentes de partido en un formato distinto al que teníamos”, dijo a la salida la presidenta de la UDI, Jacqueline Van Rysselberghe. 

No se volverá a los comités políticos ampliados, tradicionales de los días lunes, que luego del ajuste ministerial de julio y la votación del primer retiro del 10% desde las AFP, cesaron como fórmula de coordinación. “Esta propuesta de trabajo se orienta a identificar prioridades con miras a fortalecer a la coalición, así como definir dónde queremos estar, y de interpretación de la sociedad chilena”, puso Delgado en la presentación a la que accedió PAUTA. 

“Hace tres meses se habló de un nuevo trato entre los partidos de Chile Vamos y también entre el Gobierno con los partidos. Hace tres meses que estábamos esperando algo como lo que este lunes ocurrió. El nuevo ministro ha presentado una propuesta innovadora tomando justamente las palabras que habíamos dicho hace tres meses”, comentó el presidente del PRI, Rodrigo Caramori.

Vocerías colectivas, un nuevo chat y reuniones de emergencia

En sus primeras entrevistas como jefe del Gabinete político, Delgado planteó que su gran desafío era ser “un conductor de Chile Vamos” y con ese ánimo planteó su fórmula de trabajo. “Quiero líneas claras de comunicación”, fue una de las peticiones del ministro. El titular del Interior aseguró que los desafíos sociales y políticos actuales “implicaban una oportunidad para fortalecer a Chile Vamos y a contribuir a sus objetivos”. 

Pidió reflexionar y posicionar los temas que los unen y “que puedan ser proyectables a largo plazo”; fomentar el debate interno, el planteamiento de ideas y la cohesión de los miembros de Chile Vamos. 

De hecho, en el texto que les entregó a los dirigentes de la UDI, RN, el PRI e incluso Evópoli -quien fue representado por su secretaria general, Luz Poblete, en calidad de presidenta subrogante, mientras se descongelan las relaciones con los parlamentarios de La Araucanía, entre ellos el presidente de la tienda, Andrés Molina-, solicitó retomar las vocerías semanales de coalición y priorizar las reuniones presenciales.

Además, el ministro propuso un nuevo chat de coordinación y la citación de reuniones telemáticas cuando haya urgencias. Además, dejó a cargo a su nuevo jefe de gabinete, Gonzalo Guerrero, la preparación de los encuentros.

Delgado también les comentó la idea de incluir a otras voces partidarias. En esta línea, sugirió reuniones con las comisiones políticas y técnicas cada dos meses, para revisar “temáticas de interés transversal de la coalición”, así como otros temas de relevancia para cada colectividad. 

“Él tiene un estilo que es cercano y muy ejecutivo. Es muy práctico. Fue muy innovador en la propuesta metodológica que nos hace para poder mantener y retomar la coordinación con Chile Vamos. Eso también va a ser muy bueno para tener un solo mensaje desde el Gobierno y desde la coalición”, explicó Luz Poblete. 

¿El nuevo trato 2.0?

Dentro de las propuestas, el exalcalde también planteó que los secretarios generales y asesores de partidos puedan ayudar a resolver los conflictos menores y la posibilidad de crear subcomités especializados cuando sea necesario, por ejemplo, para el ciclo electoral 2021. 

“Son historias distintas, son perfiles distintos, son maneras distintas. Ambos tienen una misma idea, un mismo principio, pero cada uno con su estilo. Lo que tiene que hacer es tratar de plasmar lo que está haciendo el Gobierno de la mejor manera posible para que le gente pueda entenderlo”, dijo la jefa de la UDI al referirse a las diferencias entre Delgado y su antecesor, Víctor Pérez, quien por 98 días dirigió con ciertas dificultades las relaciones en Chile Vamos. 

Luego del Plebiscito, las filas oficialistas no se ordenaron tan fácilmente como le habría gustado al Gobierno. La votación de ciertos proyectos emblemáticos, como el segundo retiro del 10% desde los fondos previsionales y la acusación constitucional contra el exministro Pérez, resintió los ánimos internos y también en la relación de algunos dirigentes de Chile Vamos con los miembros del Comité Político. Conocidas son las tensiones entre la UDI y Evópoli y el titular de la Segpres, Cristián Monckeberg. O las críticas de una parte de RN al ministro de Hacienda, Ignacio Briones. De hecho, los principales descolgados del segundo 10% están en las filas de Renovación Nacional. 

Mirando estos posibles conflictos, Delgado planteó que en esta “nueva fase” la base de la relación con el oficialismo sea la organización del trabajo interno, la identificación de temáticas comunes y la formulación de estrategias comunicacionales para mostrar “los acuerdos o las acciones se realizarán como coalición”.

“Confío en la capacidad que tiene él de poder leer muy bien lo que pasa”, dijo el presidente de RN, Rafael Prohens, quien además confesó que no conocía al exalcalde más allá de su trayectoria pública.

De hecho, ante las diferencias de criterios que deberá enfrentar Delgado y que tendrá su primera prueba este martes en el Congreso con la votación del segundo retiro previsional, el senador puso paños fríos a la idea de que el resultado sea un nuevo revés para el Gobierno y para Chile Vamos. “Eso no quiere decir que el bloque esté quebrado o con alguna diferencia. Tenemos matices distintos en algunas materias y eso parte de la diversidad que tenemos”, agregó Prohens.