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Y sin embargo, se mueven: cómo funcionan ahora las alianzas de colectivos en la Convención

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Agencia Uno
POR Paul Follert |

Las listas han reordenado sus posiciones en los casi tres meses de proceso. Un especialista explica que las comisiones han sido decisivas para que exista un mayor cruce de votos y apoyos.

Entraron 155 convencionales. Siguen los mismos 155 (aunque el caso de Rodrigo Rojas Vade aún está en definición). Pero donde sí ha habido cambios, y abruptos, es en la composición de fuerzas políticas en estos casi tres meses de Convención Constitucional. Varios han renunciado o refichado por otros “colectivos” (el concepto usado en vez de decir “bancadas” como en el Congreso), las que incluso se han diluido o han cambiado de nombre.

Apruebo Dignidad, por ejemplo, es una lista que entre sus filas tenía a 28 convencionales del Frente Amplio y el Partido Comunista. Era la segunda fuerza más grande de la Convención luego de Vamos por Chile (37). Ninguna por sí sola, en cualquier caso, pesaba lo suficiente como para tener poder de veto pues no llegan a un tercio (52).

Sin embargo, el desarrollo del proceso constituyente generó diferencias entre los integrantes de Apruebo Dignidad. Hay un distanciamiento cada vez más marcado. La falta de apoyo del Frente Amplio a Bárbara Sepúlveda (PC) para que llegara a la Mesa Ampliada fue uno de los primeros conflictos entre ambas agrupaciones. Fue un problema que tuvo su punto más álgido con las diferencias en la ratificación del cuórum de dos tercios para aprobar normas constitucionales, lo que terminaría por dividir al Partido Comunista del Frente Amplio. Ella misma propuso en el Reglamento que los votos de abstención se considerasen inválidos, pero este jueves 23 de septiembre recibió un rechazo transversal (frenteamplistas incluidos) a esa idea.

Una separación algo menos conflictiva fue la ocurrida en la Lista del Apruebo. En ella, los militantes del Partido Socialista y los independientes cercanos a ese partido se agruparon para formar el Colectivo Socialista, integrado por 17 convencionales. El resto de la lista, principalmente de personeros asociados a la ex-Concertación, formaron el Colectivo del Apruebo. Su última incorporación fue Agustín Squella y son ocho en total.

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Otra fuerza que ha sufrido cambios, aunque menos traumáticos, es Independientes No Neutrales, quienes ingresaron a la Convención con 11 miembros. La baja de Miguel Botto para unirse al Colectivo del Apruebo, los dejó con uno menos. Sin embargo, el pasado 8 de septiembre se sumaron Mauricio Daza y Jorge Abarca. Así, son 12.

Al igual que INN, el de los Movimientos Sociales Constituyentes se ha mantenido relativamente estable en el desarrollo del proceso constituyente. El medioambiente y el feminismo son los ejes de este colectivo, donde 10 de sus 12 integrantes son mujeres.

Un capítulo aparte tiene la altisonante historia de Pueblo Constituyente. Es la agrupación más nueva de la Convención y se formó luego de la desintegración de La Lista del Pueblo. Partieron con 27 convencionales, y al cabo de un par de meses se quedaron en 20. Tras la mentira de Rojas Vade, el grupo quedó en 19. Esta misma semana el naciente Pueblo Constituyente sufrió cuatro bajas más.

Los escaños reservados es otra de las agrupaciones que si bien no ha tenido cambios en su composición, sí ha entregado luces de las diferencias en su interior. Los pueblos del norte han manifestado sus discrepancias respecto del pueblo mapuche, lo que se evidenció cuando algunos convencionales nortinos cuestionaron la dirección de Elisa Loncon.

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En Vamos por Chile no han existido salidas desde su lista, pero sí se han manifestado diferencias internas, sobre todo en el tono de la discusión. Los representantes de RN y Evópoli se han posicionado como los sectores “más dialogantes” de la Convención, lo que se pudo ver el día en que presentaron un comunicado donde invitaron a los escaños reservados al diálogo y al trabajo en conjunto.

Para los convencionales de la UDI este camino ha sido más difícil de encontrar. Algunos de sus pares los acusan de tener una postura más confrontacional e, incluso, la convencional Francisca Linconao ingresó un oficio a la Comisión de Ética donde acusó a constituyentes como Arturo Zúñiga (UDI) y Katherine Montealegre (UDI) de actitudes racistas y discriminatorias.

¿Cómo se han establecido los puentes de diálogo?

Las diferencias en Vamos por Chile han quedado de manifiesto en las votaciones de la Convención, donde el ala más “dialogante” de la derecha ha ido corriéndose al centro. “Es el efecto de las comisiones, el efecto del diálogo dentro de las comisiones ha llevado a que la cohesión dentro de Vamos por Chile sea menos robusta de cómo lo veíamos al principio”, comenta Sergio Toro, coordinador académico de Plataforma Telar e investigador del Instituto Milenio Fundamentos de los Datos.

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Entre los convencionales que se ubican en las posiciones más hacia el centro están los RN Luciano Silva, Paulina Veloso y Manuel Ossandón. Este último incluso ha logrado establecer varios acercamientos con Independientes No Neutrales, donde ha patrocinado al menos tres de las propuestas provenientes de ese colectivo, mismo apoyo que han entregado Alvaro Jofré (RN) y Roberto Vega (RN).

Si en algunas comisiones Independientes No Neutrales logró apoyos de Vamos por Chile, en el Pleno estos últimos han formado parte de una de las fuerzas más grandes de la Convención. Se trata de la alianza entre el Frente Amplio, Colectivo Socialista, Colectivo del Apruebo y los propios Independientes No Neutrales, que en total agrupan a 52 convencionales. Es decir, esa suma de boques conforman un tercio.

La principal fuerza de esa alianza proviene del Frente Amplio y el Colectivo Socialista, los cuales han votado de manera conjunta y uniforme. Pero no solo tienen coincidencias en cuanto a votaciones, sino que han trabajado en conjunto las indicaciones a los reglamentos que comenzaron a votarse desde este 23 de septiembre.

Si bien el Frente Amplio ingresó como aliado del Partido Comunista, en la práctica no ha funcionado como tal, más allá de determinadas coincidencias. “Lo que veíamos en un primer momento era una alta distancia entre el Frente Amplio y el Partido Comunista […] Lo que tú estás viendo es que el Partido Comunista se está acercando al Frente Amplio no en términos de posición, pero sí en términos de alguna votaciones que yo también lo atribuyo al efecto de las propias comisiones”, advierte Toro. Agrega que esto podría implicar que si el PC “se acerca al Frente Amplio, uno va a poder ver también una cercanía con el Colectivo Socialista”.

Con el grupo que el Partido Comunista (seis convencionales) sí ha encontrado un diálogo más fluido es con Movimientos Sociales Constituyentes (12), varios de los escaños reservados y Pueblo Constituyente. En total, menos de un tercio de la CC. Quizás la muestra más clara de esto es el apoyo común que han tenido para cambiar el cuórum de dos tercios a tres quintos para la aprobación de normas constitucionales.

Y si bien todavía se mantiene una fuerte cohesión de cada colectivo, sí se percibe una salida de los convencionales de sus posiciones iniciales para establecer acuerdos con otros sectores. “El efecto de las comisiones ha hecho que finalmente los convencionales tengan opiniones distintas respecto de temas particulares. Por tanto ya no se ven estos votos tan en bloque como se vivía en un primer momento”, concluye Toro.

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