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El cambio en Trabajo: entra Patricio Melero, sale María José Zaldívar

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POR Cecilia Andrea |

La ministra, que asumió en los días más complejos del estallido social, abandonó su cargo por motivos personales. La reemplaza expresidente de la UDI, quien tuvo una de las carreras parlamentarias más largas del Congreso: fue diputado desde 1990 hasta hoy.

¿Por qué se va?

La ahora exministra María José Zaldívar llegó en los días más duros del estallido social y, a diferencia de varios de sus pares, mantuvo un bajo perfil público, asociado solo a su rol en materias laborales y previsionales. La abogada es experta en materias de seguridad social y ejerció anteriormente como superintendenta del área y, en este Gobierno, como subsecretaria de Previsión Social.

En su gestión ni siquiera se conoció su opción para el Plebiscito constituyente, a pesar de que se la relacionó con el Apruebo. Hija del fallecido senador Adolfo Zaldívar, es independiente y si bien ha hecho lazos con parlamentarios de todos los sectores, no es cercana a ningún partido político en específico. 

En enero, cuando el entonces ministro de Hacienda Ignacio Briones abandonó su cargo para optar por una candidatura presidencial, Zaldívar también había buscado dejar el gabinete. “El Presidente me ha encargado seguir encabezando el trabajo de la reforma de pensiones”, dijo la abogada tras ser convencida de permanecer en el cargo en esa oportunidad.

La razón de su salida es el desgaste y la necesidad de enfocarse en su familia. 

¿Quién llega?

Patricio Melero (64) fue elegido diputado en 1989, el mismo año en que ingresó a la UDI, y ha sido reelegido en siete ocasiones aunque en diferentes distritos de la Región Metropolitana. Esta extensa trayectoria lo situó entre los 37 diputados a los que la ley de límite de la reelección impide repostularse, por cumplir con creces los tres periodos exigidos por la nueva norma.

Ingeniero agrónomo de la Universidad de Chile, lideró la Secretaría Nacional de la Juventud entre 1983 y 1985 y luego fue designado alcalde de Pudahuel, cargo que ejerció hasta 1989, para participar en la primera campaña electoral con la que concluyó la dictadura.

Es conocido por ser un UDI de perfil más “duro” y eso puede tensionar su rol como ministro, pues desde que su nombre comenzó a sonar como el reemplazo de Zaldívar, se levantaron las primeras críticas entre parlamentarios de oposición. Otro factor complejo es la relación con su hermano Manuel, quien hasta este miércoles presidió la Cámara Nacional de Comercio (CNC), un gremio altamente influyente y con trato directo en la cartera de Trabajo. Por ejemplo, el último encontrón entre la CNC y el Gobierno fueron las restricciones a los servicios esenciales. 

De hecho, antes de la confirmación de que el diputado se convertiría en secretario de Estado, el titular de la CNC abordó el punto. Según dijo, en entrevista con CNN Chile, para él no existía conflicto de interés, porque “iba de retirada”, ya que le quedaba un mes en ese cargo. Sin embargo, en la tarde, antes del ajuste de gabinete, Manuel Melero adelantó su salida y renunció. Según señaló, a través de un comunicado, tomó la decisión luego de realizar “un profundo análisis de la situación, tanto desde el punto de vista legal como ético”. 

En lado más político, Patricio Melero ha ocupado importantes cargos en su partido. En 2003 fue secretario general de la presidencia de Pablo Longueira y casi una década más tarde se convirtió en el timonel de la UDI entre los años 2012 y 2014, aunque los resultados electorales en esa ocasión no lo acompañaron. Nunca fue un “coronel”, como la UDI denomina a sus políticos más influyentes (Jovino Novoa, Longueira, Andrés Chadwick y Juan Antonio Coloma). Tampoco tuvo la oportunidad de postular al Senado, como fue el caso de su correligionario Víctor Pérez, que asumió brevemente como ministro de Interior.

Por su larga estadía en el Congreso, Melero fue presidente de la Cámara de Diputados, varias veces asumió como jefe de la bancada UDI y se convirtió en uno de los parlamentarios más influyentes de la derecha. Tuvo un rol relevante en la tramitación de iniciativas legislativas importantes y muchas de ellas polémicas, defendiendo siempre la visión del partido. Su presencia en las comisiones de Hacienda y Trabajo es muestra de la relevancia que adquirió como una de las voces más escuchadas del oficialismo en estos temas. Su especialidad en esas materias y su conocimiento del Parlamento, al revés y al derecho, son dos factores importantes para entender su nombramiento.

En Chile Vamos y también en la oposición le reconocen un buen trato personal. Con 30 años caminando por los pasillos del Congreso, Melero conoce en detalle no solo a los funcionarios, sino también los vericuetos del reglamento y los trámites. 

Principales prioridades: la reforma de previsional

Tras un año sin avances en la Comisión de Trabajo del Senado, la Reforma de Pensiones se convertirá en la principal tarea de Melero. El texto se aprobó en general y hoy está votándose en particular, pero lejos de ver la luz. El escenario no es optimista, porque a pesar de que el Gobierno ha flexibilizado algunas posturas, desde la oposición no hay total unidad de miradas y qué pasará con el repartición de los seis puntos de cotización extras sigue siendo una piedra de tope. Las coincidencias de la centroizquierda están en la necesidad de avanzar hacia una pensión universal y eliminar a las AFP tal como se conocen hoy. Dos puntos que no tienen eco directo en La Moneda. 

Las diversas negociaciones en que el Ejecutivo buscó acercar posiciones no rindieron frutos, por lo que hoy el escenario más probable es que todo termine definiéndose en una Comisión Mixta de diputados y senadores. Sin olvidar que esta conversación estará marcada por la posibilidad de un tercer retiro de los fondos desde las AFP.

También, será prioridad para la agenda de Melero el rezago que muestra el empleo en medio de la pandemia, ya que a la fecha la recuperación de puestos de trabajos perdidos no es plena. Más si se considera que muchos trabajadores simplemente están fuera de la fuerza laboral, esperando una oportunidad para buscar trabajo. Por esto, es clave dar continuidad a los subsidios a la contratación, las transferencias a las familias y los apoyos a las madres trabajadoras.