Actualidad

El choque de poder tras la declinación presidencial de Chahuán

Imagen principal
Agencia Uno
POR Cecilia Andrea |

El senador Francisco Chahuán usó La Moneda para anunciar que no competirá por gobernarla. Mario Desbordes acusó la intervención de “poderes fácticos”.

Irónicamente, el escenario que el senador Francisco Chahuán (RN) usó para anunciar que desistiría de la competencia presidencial fue La Moneda. Aprovechó que estaría allí por una actividad con el ministro de Salud, Enrique Paris, e hizo una convocatoria de prensa para informar que congelaba su militancia en el partido, que declinaba su precandidatura presidencial, que se había instalado una “cultura de la coacción” en la colectividad y que todas las instituciones internas estaban fragmentadas. 

Por Whatsapp, envió a los representantes de la directiva la carta con sus aprensiones y se marchó. Todo a solo un día de que el Consejo General de RN defina quién será el candidato oficial para representar al partido en las primarias presidenciales de Chile Vamos.

Ahora Mario Desbordes corre solo y aparentemente con ventaja. El martes, cuando inscribió su candidatura en la sede de Antonio Varas, llevó más de 300 patrocinios de los consejeros, que en total son 505. En el entorno de Desbordes y en la misma directiva ven ahí la razón de lo que ocurrió este viernes. Según esas versiones, la diferencia de apoyos golpeó a Chahuán y terminó por convencerlo de que no debería competir.

Mas en el entorno de Chahuán hablan figurativamente de “sicariato”. De acuerdo con esa otra lectura, los episodios claves que habrían terminado por definir su opción ocurrieron a principios de semana, en un Consejo Regional en el que un diputado desbordista de su propia tienda lo trató de “mitómano”, situación que el expresidente de RN Carlos Larraín retrató escuetamente en una carta enviada a los consejeros nacionales.

Una “operación” desbordista

“Acá se ha instalado una cultura de la coacción, se ha instalado una cultura que de alguna manera busca el poder por el poder, a cualquier costo, y yo no estoy dispuesto. No creo en esa forma de hacer política. Se ha creado un clima perjudicial y espero que el partido recupere la sensatez”, dijo Chahuán en La Moneda.

La tesis del sector chahuanista explica que lo que está detrás de todo esto es la intención de Desbordes de volver a hacerse con la dirigencia del partido. Una pugna de poder. “Apoderarse definitivamente de Renovación Nacional”, decía Larraín dos días atrás en la misiva que envió para solicitar el aplazamiento del Consejo.

Los dos se referían, entre otras cosas, a un hecho en concreto. El lunes, Chahuán encabezó el Consejo Regional de Valparaíso, y lo que debía ser una rendición básica de cuentas sobre las negociaciones electorales, terminó en un escenario salvaje.

“Fue una operación para botar la mesa de Chahuán”, dice uno de sus colaboradores más cercanos. En concreto, varios consejeros increparon al senador por una serie de inscripciones que habían sido pactadas previamente y que, por supuesta obra de Chahuán, finalmente no se efectuaron. Incluso el diputado Andrés Longton (RN) lo acusó de poco ético, mitómano y le enrostró episodios similares de épocas pasadas. 

El martes, en otra versión del Consejo Regional, el tono fue similar. Finalmente una vicepresidenta, el secretario general y el tesorero de la directiva de Valparaíso renunciaron. Chahuán puso su cargo a disposición, lo que terminó este viernes con la vacancia de la presidencia del partido en esa región. 

“El senador Chahuán, como presidente regional, ha tenido que responder por su actitud en esta semana. Y eso es un problema local, de Valparaíso, que no tiene nada que ver con mis adherentes ni nada que ver con mi campaña”, contestó Desbordes este viernes.

El golpe de los números

Con o sin Chahuán, el Consejo General se celebrará este sábado. En vez de presentar las dos candidaturas inscritas, solo quedará la de Desbordes vigente, por lo que los consejeros tendrán que optar entre él o nada. El resultado es tal vez previsible. El excarabinero logró el apoyo de más de 300 personas, lo que lo convierte automáticamente en el preferido por la mayoría y, por lo tanto, más probable ganador de la tarde.

En el equipo de Desbordes no tienen dudas: ese número sería el causante de la baja de Chahuán. De hecho, quienes estuvieron presentes en el conteo de las fichas que llevó el senador a su inscripción dicen que eran apenas 100 y no 120, como había afirmado. Y es más: antes de las inscripciones, la directiva había fijado en 50 el número de patrocinios necesarios para anotarse como precandidatos. Nicolás Cerda, vicepresidente de RN y cercano a Chahuán, solicitó que fueran 35. Según dicen desde el equipo del senador, hoy son cerca de 180.

Que el mismo Chahuán llegó a inscribirse, “optimista”, con sus patrocinios, rodeado de algunos de sus seguidores y usando gorros con su lema, es lo que hace dudar hoy a varios de la mesa de RN. 

“Inconsecuentes los dichos del señor Chahuán, que hace dos semanas llegó solo, vino con gente, trajo el patrocinio de los consejeros a una elección que él encontraba que era democrática, y dos semanas después se retracta de todo lo que dice. Nosotros les hemos dado garantías a todos los que han querido ser candidatos”, respondió este viernes Rafael Prohens, presidente de RN.

La influencia de los poderes fácticos

La última semana fue compleja para RN. Antes de renunciar a su candidatura, el parlamentario por Valparaíso hizo una solicitud al Tribunal Supremo para aplazar el Consejo que aún está pendiente y podría cambiar los planes; Larraín envió su carta; el abogado Marcelo Brunet levantó la misma petición en la comisión política del partido; y 13 parlamentarios adherentes de RN firmaron otra pidiendo libertad de acción para escoger la candidatura presidencial. El objetivo, según los desbordistas: que la candidatura del excarabinero no prospere. 

Este viernes, Desbordes fue un paso más allá: señaló a Tomás Fuentes como uno de los involucrados, pero denunció que había hilos manejándolo. Fuentes fue asesor de Andrés Allamand y en los últimos meses ha intentado, sin éxito, que Sebastián Sichel sea el candidato de su partido.

Aquí hay personas que van a hacer todo lo posible por que yo no sea candidato presidencial, que van más allá de RN. Aquí están de verdad operando en gloria y majestad los poderes fácticos. Eso es lo que hay detrás de tanta acción concertada, diaria, para tratar de bajar mi candidatura”, denunció Desbordes. 

La idea de los “poderes fácticos” interviniendo en política no es nueva; de hecho, en Chile fue patentada en los 90 por el propio Andrés Allamand.

Prohens confirmó que este sábado no se dará la oportunidad de votar la libertad de acción -como quería Fuentes- ni se someterá a escrutinio la decisión de elegir o no este sábado al candidato. Detrás de la decisión de la mesa hay dos razones: primero, que la libertad de acción “nunca ha ocurrido”, según dijo el mismo presidente del partido. Pero si se diera ahora, nada impediría que los militantes apoyaran a candidatos de otras colectividades para todas las otras elecciones y aquello, según explican fuentes de RN, incomoda a la directiva.

Y en cuanto a la definición presidencial, la idea de Prohens era empezar a elevar la popularidad de los precandidatos de RN, que son los últimos de Chile Vamos en las encuestas hoy. Por eso no quiso posponer el Consejo, sin perjuicio de que le propuso a Desbordes y a Chahuán que, si querían aplazarlo, se pusieran de acuerdo. Desbordes no quiso.

Para este sábado, el pronóstico aún es incierto. Desbordes podría ganar fácilmente, claro, pero también ya hay una movida de parte de Fuentes para que quienes querían libertad de acción o aplazar el Consejo, no participen de él.

“Luego de las semanas de persecución, presiones, amenazas, intolerancia y secuestro de las diferentes instancias del partido, es que hago un llamado a no legitimar un proceso que está completamente viciado, es decir, a no participar en el Consejo de mañana. Yo no seré parte de ese montaje”, se lee en una carta que envió.