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Tercer retiro del 10% quedó en manos del TC y se abre un escenario incierto

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Agencia Uno
POR Ana María |

“Todos queremos lo mejor para nuestros compatriotas”, dijo el ministro Juan José Ossa al anunciar la decisión del Gobierno.

Fueron varios días de tensión y anuncios desde La Moneda y, al mismo tiempo, de amenazas y advertencias de la oposición de que no se recurriera al Tribunal Constitucional (TC) por el tercer retiro del 10% de las AFP. Pero, finalmente, el Gobierno lo concretó y la tarde del 20 de abril, confirmó la presentación del requerimiento para que se declare inconstitucional la reforma impulsada por el Congreso.

“Todos queremos lo mejor para nuestros compatriotas”, dijo el ministro de la Segpres, Juan José Ossa, al anunciar desde La Moneda la decisión del Gobierno. Y, sobre el proyecto de reforma constitucional para el retiro de fondos, recordó que durante toda su tramitación en el Congreso, “hicimos presente de que se trata de una mala política pública que perjudica a las pensiones” y que es “una iniciativa inconstitucional”.

De hecho, la discusión que se produjo desde la semana pasada, primero en la Cámara, y luego en el Senado, provocó que los abogados constitucionalistas fichados por La Moneda, Marisol Peña y Gastón Gómez (quien alegó para el segundo retiro), tuvieran dos escritos listos para ingresar al TC . Cada uno para cualquiera de los dos escenarios que se estaban dando en el Congreso.

El primero de ellos se cayó por falta de votos. Era la moción de modificar un artículo permanente de la Constitución que permitía a los parlamentarios que, mientras operara el estado de catástrofe, podían presentar reformas que permitan a los afiliados de las AFP sacar sus fondos. Un escenario para el que estaba encargada la expresidenta del TC, Marisol Peña.

Ahora, el recurso que se presentará va por el otro escenario, que aunque jurídicamente es similar al que se produjo en diciembre pasado con el segundo retiro de los fondos, no es el mismo. Por un lado, esta vez la Cámara incluyó en el paquete a la rentas vitalicias y, por el otro, el Gobierno no presentó su propio proyecto como sí ocurrió en diciembre del año pasado.

Así, esta vez el Gobierno volverá a impugnar que el Congreso se atribuya funciones que, según la Constitución, son de iniciativa exclusiva del Presidente de la República.

Es un punto por el que el TC ya se pronunció el año pasado. Entonces, el fallo –que acogió todos los planteamientos del Presidente Sebastián Piñera consideró que se vulneraba la iniciativa exclusiva del Mandatario y que hubo de parte de los parlamentarios infracción al derecho a la seguridad social.

Los inciertos votos en el TC

La apuesta del Gobierno en el TC esta vez es incierta. Si bien para el segundo retiro obtuvo un triunfo, este fue solo gracias al voto dirimente de la presidenta del TC, María Luisa Brahm. Fue la abogada, quien fue jefa de asesores de Piñera en su primer gobierno, quien terminó con el empate de cinco a cinco. Un empate en el tribunal significa que los jueces no llegaron a un consenso. Así, el escenario está en el límite.

En todo caso, esta vez el TC debe pronunciarse por dos asuntos distintos: el retiro de fondos por iniciativa del Congreso y el retiro desde las rentas vitalicias.

En diciembre, además de Brahm –que en rigor votó dos veces-, quienes apoyaron la tesis del Gobierno fueron los ministros Iván ArósticaMiguel Ángel Fernández, Cristián Letelier José Ignacio Vásquez.

El voto de Vásquez, sin embargo, fue un misterio para el Ejecutivo hasta el final. Primero estuvo en contra de la admisibilidad del recurso, incluso fue extremadamente crítico. Luego, cuando se vio el fondo, estuvo en la mayoría.

Otra sorpresa para el La Moneda fue el voto del ministro Juan José Romero, quien primero votó a favor de la admisibilidad y luego rechazó la presentación del Presidente Piñera. Esto, pese a que suele tener coincidencias jurídicas con el grupo que acogió la tesis del Ejecutivo.

Así, Romero fue parte de los cinco votos que rechazaron el recurso del Gobierno ante el segundo retiro con María Pía SilvaNelson Pozo SilvaRodrigo Pica y Gonzalo García.

Pero Romero fue un caso especial, pues redactó su propio voto en contra y con consideraciones distintas a los otros cuatro ministros. Por ello, el Ejecutivo ha puesto los ojos -y expectativas- en que, esta vez, pueda votar, eventualmente, a su favor. 

Clima interno crítico

Pero hay otro factor que hace distinto el escenario al de diciembre: el TC se encuentra quebrado internamente, en especial entre los cinco ministros que votaron a favor del Gobierno en el segundo retiro.

La acusación de maltrato y acoso laboral en contra de Brahm, quien tiene un sumario abierto que gestionó a Aróstica y que investiga Pica, mantiene una tensión inédita al interior del TC.